Hace 6 años se estrenaba en BAires "YIYA, El Musical"

 


Estreno 15 de Abril 2016
Teatro El Nacional

Autoría: Osvaldo Bazán
Música: Ale Sergi

Actuaron: Patricio Contreras, Tomás Fonzi, Fabián Gianola, Virginia Kaufmann, Tiki Lovera, Karina K, Iride Mockert



Coreografía: Alejandro Ibarra
Pelucas: Fabián Sigona
Maquillaje: Florencia Ortells
Diseño de vestuario: Sofía Di Nunzio
Diseño de escenografía: Magali Acha
Diseño de luces: Eli Sirlin
Diseño sonoro: Osvaldo Mahler
Realización de escenografia: Estudio QVP
Stage Manager: Juan Manuel Caballe, Leandro Rivera
Fotografía: Fuentes Fernández Fotografías
Diseño gráfico: Lucila Gejtman, Patricio Morales
Asistencia de escenografía: Sofia Francis, Vanessa Giraldo
Asistencia de iluminación: Verónica Alcoba
Asistencia de vestuario: Laura Croce
Asistencia de dirección: Juan Manuel Caballe
Arreglos corales: Sebastián Mazzoni
Producción ejecutiva: Roni Isola
Producción general: Gabriel Garcia, Juan Pelosi
Dirección musical: Bruno Delucchi
Dirección vocal: Sebastián Mazzoni
Dirección: Ricky Pashkus


La historia de Yiya Murano, la envenenadora de Monserrat, que en 1979 envenenó a sus tres mejores amigas es el centro del musical de Bazán/Sergi/Pashkus.

Karina K será la diabólica protagonista.

«Yiya, el musical» se basa muy libremente en una historia real del policial negro que sigue vigente en la memoria nacional, la de “La envenenadora de Monserrat”, quien al no poder devolver el dinero que sus tres mejores amigas le habían prestado, las mata envenenándolas con bombas de crema casera.


Sin embargo, el musical no se regodea en los aspectos más morbosos de la historia, todo lo contrario. El paso del tiempo desde aquél hecho real –1979- hasta hoy permite una mirada ligada al humor negro y al desparpajo.

Es con humor que esta Yiya se convierte casi en un capo cómico de revista, recordando el género que tan popular era en aquél momento en el país. Por eso hay escalera, números de baile, lujo.

Es también una reflexión sobre los límites que no hay que cruzar en la vida, tanto en las relaciones familiares como en las sociales.


En “Yiya, el musical” se muestra a la protagonista en sus facetas de madre, esposa, amante y amiga.

Su receta de bombas de crema con ingrediente secreto se muestra en un número de canto y baile.

Se cuenta cómo entró en una carrera de ambición –ayudada por la época de la bicicleta financiera, que tiene un número musical especial- y cómo, al verse acorralada no encuentra otra solución más que matar a sus amigas.


Finalmente en la cárcel hará un balance de lo que ocurrió y tendrá un gran número final de teatro de revista en donde grandes monstruos nacionales –Robledo Puch, el Petiso Orejudo, el odontólogo- reconocerán una verdad que a veces parece olvidada: matar está mal.

Claro que todos ellos envueltos en el clima de la revista porteña.